Pulsera Brote
Es la unión de Ámbar Cognac con Lapislázuli.
Te contamos cómo resuena la energía de cada piedra:
Ámbar Cognac
El ámbar contiene ácido succínico, que al entrar en contacto con el cuerpo es absorbido por el torrente sanguíneo, actuando como analgésico y antiinflamatorio natural.
Alivia dolores cervicales, articulares, de artritis, calma alergias e infecciones, regula la glándula tiroides y estabiliza el sistema inmunológico general.
Lapislázuli
El lapislázuli tiene la habilidad de potenciar sueños y capacidades físicas. Aporta paz, calma y serenidad, desprendiendo el estrés del cuerpo.
Armoniza los niveles mentales, espirituales, emocionales y físicos. Brinda mayor claridad y autoconciencia, dando fortaleza en las emociones y pensamientos.
Erradica las migrañas y dolores de cabeza, y ayuda a superar la depresión. Fortalece el sistema inmunológico, respiratorio y nervioso.
Alivia las dolencias relacionadas con la garganta y la tiroides, ayuda a purificar la sangre de sustancias dañinas, como el cigarrillo o el alcohol.
Es excelente para conciliar el sueño, reducir el estrés y transmitir calma y serenidad al cuerpo y la mente. También es beneficiosa para los niños que padecen el síndrome de Asperger o con déficit de atención, ya que mejora la concentración. Colocar una piedra lapislázuli sobre los ojos inflamados alivia la hinchazón.
Cómo está hecho
Esta pulsera está armada con hilo extra resistente, anudado entre cuenta y cuenta para mayor seguridad, y tiene cierre plástico hipoalergénico.
